Es otoño tenemos Halloween a la vuelta de la esquina (literalmente… ¡es esta noche!) Y no podía ser que no tuviese aun una receta con calabaza en el blog. ¡Con lo que me gusta! Así que hoy si o si, te tenía que traer si o si una receta con calabaza.
Nunca he sido fanática de Halloween. De hecho, nunca hemos celebrado Halloween, ya que, en España, no es una festividad tradicional. Asi que solo puede experimentar lo que es el verdadero negocio de Halloween cuando vine a Nueva York. El primer año a los niños no les gustó mucho, creo que estaban algo perdidos. ¡Pero el año pasado fue increíble! Salimos con algunos vecinos y con mi cuñado que estaba allí, por la calle y me quedé absolutamente anonadada por la locura que había montada en las calles, las decoraciones en los edificios y las casas adosadas, la amabilidad de la gente que solo quería hacer felices a los niños y las caras de los niños cuando llegaron a casa con todas sus caramelos y guarradas (de verdad, que había auténticas guarradas), que por cierto todavía los tengo guardados en una caja.
Este año no podremos estar allí, ¡pero aquí también tenemos calabazas y el espíritu de Halloween está por todas partes! Y como no, ¡calabazas! De todos los tamaños y colores. ¡No tenía ni idea de que había tantos tipos diferentes de calabazas…!
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La calabaza es un ingrediente imprescindible en todas las cocinas en esta temporada de otoño. Y, además, es muy versátil. Puedes usarlo en sopas, cremas, guisos, chilis, ensaladas, como acompañamiento y, por supuesto, en dulces y postres.
Hoy te traigo algo distinto, te traigo un snack. Súper fácil, equilibrado y nutritivo. O postre. ¡Lo que tu prefieras! Esto es lo que vas a necesitar:
Antes de empezar con los ingredientes y preparación, te invito a que eches un ojo a mi post sobre alimentos para quedar embarazada si estás buscando una dieta para quedar embarazada
Ingredientes:
- 1/2 taza de mantequilla de cacahuete (o tu mantequilla de nueces preferida)
- 1/4 taza de puré de calabaza
- 3 cucharadas de miel
- 1 cucharadita de vainilla
- 1/4 taza de harina de coco
- 1 cucharada de colágeno (el equivalente a una ración dependiendo de la marca, yo uso este de la marca Bulletproof)
- ½ cucharada de canela
- ¼ de cucharadita de nuez moscada
- Una pizca de sal marina (omita la mantequilla de maní salada)
Para la cobertura:
- ½ taza de chocolate amargo (me gusta Lindt al 90%)
- 1 cucharada de aceite de coco.
Paso a paso:
- En un cuenco grande, mezcla la mantequilla de cacahuete, el pure de calabaza, la miel y la vainilla. Si la mantequilla de cacahuete está dura o el aceite se separa (cosa que pasa a menudo), caliéntalo en el microondas durante 30 segundos y mezcla hasta recuperar la textura de antes.
- Añade la harina de coco, las especias y la sal y mezcla hasta que esté todo bien combinado.
- Coloca la mezcla en el frigorífico durante diez minutos para que se endurezca la masa.
- Mientras la masa está en la nevera, derrite el chocolate con el aceite de coco en el microondas en incrementos de 30 segundos. ¡Cuidado con no quemar el chocolate!
- Saca la masa de la nevera y con las dos manos haz bolitas. Sumérgelas en el chocolate derretido (yo uso un tenedor para no macharme) mételas de nuevo en la nevera para que se enfríen.
- ¡Disfruta!
A mi me salieron 22 bocaditos. Cada uno de ellos tiene 69kcal con 4.6g de grasa, 2.9 de proteina y 4.7g de carbohidrato (de los cuales 1.1g son fibra.
Las calorías están calculadas a través de la aplicación MyFitnessPal y están basadas en los ingredientes y cantidades indicados en la receta. Si se realizan sustituciones, estas medidas pueden variar.